92

 
 
 
 
"Ahora se daba cuenta de que en los momentos mas altos del deseo
no había sabido meter la cabeza en la cresta de la ola
y pasar a través del fragor fabuloso de la sangre."


 
Como un rito del que ya no se esperaba la iluminación...
 
Y vuelvo a leer las páginas
buscando las claves donde no pueden estar.
Buscando la manera de entender
en que momento deje de ser la Maga y me convertí en Pola
sin darme cuenta.
 
-palabras y actos se habían sucedido
con una inventiva monotonía,
una danza de tarántulas
sobre un piso lunado,
una viscosa y prolongada manipulación de ecos.-

Y vuelvo a leer las páginas
de un juego aprendido hace años
sin querer comprender
que limitarse a esperar
puede abolir toda posibilidad real.

Pero espero,
sin esperanza y sin remedio espero;
en una habitación que va cambiando con el tiempo.
Espero pese a la repetición de innumerables fracasos,
jugando un juego que se pierde al final pero que ha sido bello jugar.

Y vuelvo a leer las páginas
y me digo que pese a todo esto es lo que quería
y que no siempre se puede ser la princesa preciosa del cuento
que alguien tiene que ser la bruja mala
que se mira sin verse en el espejo.

Aunque últimamente no me miro en los espejos
por temor a ver más de lo que me gustaría,
ya que a veces parece que denuncien oscuramente
una soledad enredada de simulacros;
una soledad tan frágil que hay que defender de los extraños.

Y vuelvo a leer las páginas
que hace tiempo me hicieron soñar determinados cielos
y me sorprendo no queriéndolos;
me sorprendo asumiendo resignada
mis realidades, aunque sean amargas.



antes y después el mundo se ha hecho pedazos y hay que nombrarlo de nuevo,
dedo por dedo, labio por labio, sombra por sombra